Título: Siete pasos para realizar evaluaciones de desempeño con atención 

Publicación: Mindful Leader (Fuente)

Autor: Bridgette Morehouse

Fecha: 8 de diciembre 2020

Que tan bien las empresas puedan crear culturas de conexión les aportará una gran ventaja. En nuestro futuro de autos autónomos e inteligencia artificial, el poder de la conexión humana será cada vez más evidente.

Las realidades del trabajo de hoy están poniendo a prueba nuestra capacidad para conectarnos de manera significativa. Vivimos en un mundo con una creciente epidemia de soledad. Aislamientos de redes sociales. La política se polariza. Y, por supuesto, tenemos la pandemia de COVID-19, las cuarentenas y el trabajo virtual. Es mucho.

Resulta evidente cómo las oportunidades de conexión se convierten en un oasis en el desierto de los lugares de trabajo de hoy. Como criaturas sociales, tenemos sed de conexión auténtica.

Cada interacción es una oportunidad para aumentar la conexión. Cada correo electrónico, cada llamada telefónica, cada llamada de Zoom. Las interacciones, cuando nos sentimos seguros con la otra persona, son oportunidades fáciles. Las interacciones que llevan un borde de nerviosismo o ansiedad son un rico terreno de práctica. Cambiar nuestro enfoque para crear más conexión puede cambiar poderosamente estas interacciones.

Discusiones de retroalimentación: una oportunidad para conectarse

La retroalimentación en el trabajo es normal y abundante; sin embargo, el proceso de revisión anual del desempeño crea un proceso artificial y formalizado que puede generar ansiedad fácilmente. ¿Podemos reimaginar este proceso como uno que cree una conexión?

En conversaciones de rendimiento normales, ya sea que estés dando retroalimentación o recibiéndola, nuestros sistemas de «lucha o huida» se activan. Las discusiones sobre desempeño, particularmente cuando se combinan con decisiones sobre compensación o promoción, pueden causar preocupación sobre el estatus, las percepciones de competencia, simpatía y equidad. Nuestra biología se hace cargo.

Las habilidades de orden superior como la creatividad, la compasión y la curiosidad se vuelven más difíciles de acceder. Los comportamientos de autoprotección como el posicionamiento, el pensamiento en blanco y negro y la confrontación se vuelven más naturales. Incluso personas con alta inteligencia emocional, alta autoconciencia y autogestión emocionales encuentran que las conversaciones sobre desempeño son agotadoras.

Las empresas se están dando cuenta y muchas están cambiando sus sistemas. De hecho, muchas empresas de Fortune 500 han abandonado por completo el proceso formal de evaluación del desempeño. Y muchos otros están reconsiderando su propósito y diseñándolos para que sean más amigables para los empleados. Si bien esto es ciertamente una tendencia, la mayoría de nosotros todavía trabajamos en empresas que tienen un proceso tradicional de evaluación y valoración.

El proceso de revisión anual del desempeño es difícil en un año normal. Y 2020 ha sido todo menos un año normal. La incertidumbre sobre los roles, los cambios en las prioridades laborales, la carga de trabajo adicional en las familias con niños en la escuela virtual, la tensión financiera y la preocupación por la seguridad laboral se sumarán a la ansiedad normal que se siente durante este tiempo.

¿Cómo podríamos reconsiderar las revisiones de desempeño como una oportunidad para crear conexiones más profundas de manera consciente?

Ya sea que te estés preparando para dar o recibir comentarios, hay algunos pasos que puedes seguir para abordar estas conversaciones de manera más consciente.

Conciencia del corazón

1. Encontrarse como seres humanos: tómate unos minutos para sentarte con la idea de que la persona con la que te reunirás es más que el rol que cumple en el trabajo. Es un ser humano con una vida rica y compleja, como tú.

2. Encontrarse con compasión: al igual que tu, todo el mundo está teniendo un año inusualmente agotador en 2020.  

Conciencia de la mente: 

3. Pensamientos sobre la reunión: considera que el propósito de la reunión es sea beneficiosa para ti. Pregúntate con compasión si tienes intenciones que estén en desacuerdo con este enfoque. Si encuentras un motivo no beneficioso, o si piensas que a la otra persona te provocará otras emociones, tómate un tiempo para examinarlo. ¿Cual es la intención? ¿De dónde viene? ¿Qué lo impulsa? Determina si podrías suavizarte a un estado de compasión y conexión.  

4. Pensamientos sobre la otra persona – Trabaja partiendo de la suposición de que las personas son buenas, justas y honestas, y que la intención detrás de sus acciones es positiva. Las personas están haciendo lo mejor que pueden, con la información, las herramientas y los recursos que tienen. Desafíate a dejar de lado tus propios juicios y nociones preconcebidas. Dale a la gente el beneficio de la duda.

Conciencia del cuerpo: 

5. El papel del sistema nervioso: nuestros cuerpos están sintonizados para minimizar el peligro y maximizar la recompensa. El cerebro decide si una situación es segura o amenazante. La mayor parte de esta toma de decisiones es inconsciente y ocurre extremadamente rápido. Antes de que nos demos cuenta, nuestro cerebro ha determinado si una situación constituye una amenaza o una recompensa y nuestro sistema nervioso autónomo se ha movilizado en busca de protección o conexión.

 6. Tu modo por defecto: tómate un momento para revisar los tres estados de las respuestas automáticas del sistema nervioso. Considera tu experiencia personal. ¿Dónde te sientes más en casa? ¿Tiende a inclinarse más hacia la protección o la conexión? ¿Sueles enfrentarte al mundo con franqueza, curiosidad y voluntad de participar? ¿O sientes que estás más en guardia? ¿Puedes recordar momentos en los que tu sistema nervioso te llevó a otra respuesta? ¿El movimiento fue consciente o inconsciente? ¿Qué pasó que se dio ese cambio? Aporta curiosidad y autocompasión a este ejercicio. Reconoce que ninguno de estos estados está equivocado, simplemente lo están. Acércate a tu examen con curiosidad y luego con compasión, y luego pregúntate por la asombrosa capacidad de tu cuerpo para adaptarse, lo que garantiza tu protección y supervivencia. 

7. El modo predeterminado de la otra persona: para practicar el cambio a la perspectiva de otra persona, piensa en un momento en el que un niño no te escuchó. Trate de no pensar en él (ella) como desafiante, si no mas bien como que aún no es capaz de regular la respuesta de su sistema nervioso. ¿Puedes imaginar que tal vez se sentía abrumado, arrastrado a un estado de entumecimiento, desconexión o abstinencia? Recuerde, este es un estado de autoprotección del que probablemente no tenían consciencia y que no podían controlar. Considera que puede que no haya tenido nada que ver contigo o tu interacción. ¿Puedes encontrar un espacio suave de compasión por ellos al ver sus comportamientos a través de esta lente? Aprender a reconocer cómo se manifiestan estos patrones de protección, nos ayuda a aumentar nuestra conciencia de nosotros mismos, y podemos comenzar a sentirnos motivados a ofrecer conexión en lugar de responder desde nuestros propios patrones predeterminados. 

Sin un pensamiento intencional, la discusión sobre el desempeño normal está preparada para inducir ansiedad en el mejor de los casos y puede tensar las relaciones y reforzar las jerarquías de poder de distanciamiento en el peor.

A medida que te acercas a las conversaciones de este año, sigue los pasos anteriores y comienza con una intención consciente de crear una conexión y ser útil. Luego, entra en la conversación con conciencia del corazón, la mente y el cuerpo. Espero que estos pasos te ayuden a abordar estas conversaciones con un corazón abierto, desde un estado de compasión y amor, y que a crear una conexión en un mundo que la necesita desesperadamente.